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Asistimos a un simulacro de emergencia química y te lo contamos

Practicar una tarea para que todo salga a la perfección, ese el objetivo de los simulacros de emergencia. Te contamos los pasos que se dan en uno de estos ejercicios para que todo el mundo sepa que hacer en una alerta de emergencia química.

 

Cuando quieres realizar una tarea a la perfección no te queda otra: practicar, practicar y practicar. Esa es la clave para que, en el caso de producirse una emergencia, todo el mundo sepa qué hacer y no se produzcan errores que podrían ser fatales.

Poner en práctica las acciones de los protocolos y planes de emergencia química es una garantía para salvar vidas. Ahí entran en juego los simulacros de emergencia química, que se realizan cada 6 meses en las poblaciones donde hay industrias químicas acogidas a la Directiva SEVESO.

Esta normativa, que regula la prevención de accidentes graves en los que intervienen sustancias peligrosas y abarca unos 12.000 emplazamientos industriales de la Europea (UE) que manipulan productos químicos o petroquímicos, obliga a contar con Planes de Emergencia Exterior (PEE) para prevenir y hacer frente a las situaciones de emergencia.

Los simulacros sirven para comprobar la eficacia de los PEE de cada empresa y evitar la improvisación en caso de producirse una emergencia de carácter químico. Las PEE establecen esquema de coordinación de las autoridades y los servicios de intervención, así como los recursos humanos y materiales necesarios para aplicarlo.

Pasos durante un simulacro de emergencia química

El pasado verano (los días 15, 17, 18 y 19 de julio) se llevaron a cabo cuatro ejercicios de activación de la red de sirenas de emergencia química en los municipios de Muskiz, Hernani, Santurtzi y Lantarón. En estos ejercicios se actúa con seriedad y profesionalidad, exactamente igual que si se hubiera producido un accidente real: no hay margen para no tomárselo en serio.

Previamente, como es lógico, se informa a la población de la puesta en marcha de estos ejercicios para que no cunda pánico. Una vez hecho esto, la actividad en la planta transcurre con normalidad hasta el día y la hora prevista para el simulacro.

Cuando se produce el accidente (en el caso de Muskiz previsto a las 12:00h), toca actuar. El responsable de seguridad de la empresa activa el Plan de Emergencia Interior (PEI) y, a su vez, comunica la incidencia al Centro de Coordinación SOS Deiak. En el caso de afecte al exterior de la planta, como consecuencia de una fuga que origine una nube tóxica (como se preveía en este simulacro), se activa también el Plan de Emergencia Exterior (PEE).

El Departamento de Seguridad, a través de la Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología (DAEM), pone en marcha la red de sirenas de emergencia química y establece, entre otros, los servicios de emergencia que deben intervenir, los cortes de carreteras que se deben realizar o el lugar en el que se sitúa el Puesto de Mando Avanzado (PMA).

Entre los organismos e instituciones que participan en estos ejercicios, además de los ya mencionados, están los Ayuntamientos de las localidades cercanas a las Z.I. (Zona de intervención) y Z.A. (Zona de Alerta); el Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS) de la Diputación correspondiente; Emergencias Osakidetza, Ertzaintza, Salud Pública del Gobierno Vasco y Departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco.

 

Así sonaron las alarmas de inicio de alerta en Muskiz…

En Hernani, acompañada de señales visuales…

El Puerto Bilbao…

Y Lantaron

Además, en caso de emergencia real, las autoridades avisan a través de megafonía o de mensajes emitidos por las emisoras de radio y televisión. En este supuesto, es importante conocer y seguir los consejos de autoprotección.

Una vez que se da por finalizada la alerta, se activa la alarma de final de emergencia. Así se escuchó durante el simulacro de Muskiz: